Por
fin he visto X-Men: Días del Futuro Pasado
(Bryan Singer, 2014) en
el cine. Lo cierto es que este va a ser un comentario realmente
breve, aunque la ocasión merecería hacer un repaso de la
trayectoria fílmica de Bryan
Singer o de las películas
previas de esta saga. Y es que esta última entrega se disfruta
muchísimo más si se han seguido previamente las seis anteriores
(escenas post-créditos inclusives. Esta también tiene, y es de las
que te dejan con la miel en los labios y ansioso por la próxima).
Por orden: X-Men (Bryan
Singer, 2000), X2
(Bryan Singer, 2003),
X-Men: La Decisión Final (Brett
Ratner, 2006), X-Men
Orígenes: Lobezno (Gavin
Hood, 2009), X-Men:
Primera Generación (Matthew
Vaughn, 2011) y Lobezno
Inmortal (James Mangold,
2013). (Tampoco estaría
de más hablar de los cómics en los que se basan cada una.)
De izquierda a derecha: Kitty, Magneto (futuro), Xavier, Lobezno, Magneto (pasado) y Bestia. |
Este
nuevo capítulo cinematográfico utiliza un argumento de viaje en el
tiempo. El encargado de efectuarlo es Lobezno
pero, a pesar de ello y a pesar de ser el Hombre-X más popular e
importante, no llega a cobrar un protagonismo abusivo. Por el
contrario, nunca deja de ser un instrumento, aunque bastante activo,
de la trama. Los realmente importantes son el Xavier, la Mística y
el Magneto del pasado, siendo los dos primeros los que más
evolucionan en el transcurso del metraje y los que toman las
decisiones más determinantes. El último, por su parte, sigue en su
línea habitual. Resulta estremecedor el momento en el que propone a
su viejo amigo jugar al ajedrez, pues en ese instante sabemos que
está tan dispuesto como siempre a sus maquinaciones habituales.
El
Xavier del pasado es un hombre destrozado y un auténtico yonqui,
caracterización que pega con la ambientación setentera
y que le hace muy distinto al joven inteligente y vitalista de
Primera Generación o
al mentor sabio y sereno de las demás. Especialmente memorable será
su encuentro con su yo futuro, ya adelantado en la promoción. Con
respecto a Mística: resulta muy gratificante que profundicen en un
personaje que ya era fascinante y atractivo (en todos los sentidos)
en sus primeras apariciones y que está resultando muy interesante en
estas últimas. Sin embargo, por muy bien que haga su papel y por
mucha cancha que le dé el guión, Jennifer
Lawrence no consigue que
olvidemos la espectacular belleza y presencia de Rebecca
Romijn; además, tiene
demasiada cara de niña buena y no termina de pegar
con la sensual y mortífera mujer fatal que será en el futuro.
Homenaje a cierta famosísima portada de los cómics. |
Los
demás quedarán ensombrecidos por estos dos, por Magneto y por
Lobezno, aunque hay elocuentes miradas de Bestia
que nos dejan a las claras los sentimientos que todavía alberga por
Raven o la lealtad que le une al Profesor. Miradas como las que nos
descubren el cansancio y el arrepentimiento del viejo Magneto, el más
que posible romance entre Bobby
y Kitty
y el dolor en general de todos los X-Men del futuro. Por no hablar
del carisma que rebosa (contra todo pronóstico) ese Peter
Maximoff;
protagonista, además, de la mejor escena de acción de toda la
película, lo que es mucho decir. De ahí la pregunta que nos hacemos
todos: ¿por qué no se lo llevan Xavier y compañía con ellos? De
cualquiera manera, Joss
Wheddon
va a tenerlas difícil con su Mercurio
y su Bruja Escarlata
en la próxima Los Vengadores: La Era de Ultrón .
Primera
Generación se construía sobre
hechos históricos reales, tales como los campos de exterminio de
Auschwitz,
la Guerra Fría
y la Crisis de los Misiles
de Cuba.
Ésta se apoya, aunque de manera más anecdótica, en el asesinato de
John Fitzgerald Kennedy,
en la Presidencia de Richard
Nixon y en el fin de la
Guerra de Vietnam.
Para mi sorpresa, muchas personas no pillaron el chiste de involucrar
a Magneto en el primero de estos acontecimientos, por lo que les
recomendaría visionar JFK: Caso Abierto (Oliver Stone, 1992)
lo más pronto posible. Y, hablando de la época: qué gracia me hizo
el guiño a la serie clásica de Star Trek (aunque
esta realmente date de los sesenta), que nos recuerda la procedencia
de Sir Patrick Steward
y la afición de Singer por ése universo y su cameo
en Star Trek: Némesis (Stuart Baird, 2003).
Creo que una película trekkie
dirigida por él me resultaría más curiosa que las de J.
J. Abrahams.
Molonidad. |
Volviendo
al asunto que nos ocupa: el mayor antagonista de la cinta es ese
aciago futuro, con la pátina de desesperada predestinación que
dibuja sobre toda ella. El principal responsable de él son la
mencionada Mística y el Doctor
Bolivar Trask. La primera
está a medio camino entre quien fue y quien será. El segundo es un
visionario dispuesto a una sangrienta cruzada por lo que cree que
beneficiará a la humanidad. Es todo un acierto asociarlo a otro
sujeto similar, como es William
Stryker, uno de los
adversarios más importantes de las películas precedentes, aunque
nunca tan amenazante como cuando le dio vida Brian
Cox (que aquí hace un
cameo) en X2. Ahora tendremos que añadir
el Junior al final de
su nombre, tras haber conocido, aunque brevemente, a su señor padre
en Primera Generación.
Magneto o Mística no serán otra cosa que necesarios reflejos
opuestos de estos dos, o de quienes puedan venir a continuar su
trabajo. Volviendo a Trask, quizás podría haberse profundizado más
en sus motivaciones, en su determinación por perseguir a aquellos
que son distintos, siendo él mismo tan diferente.
Como
digo, el filme merecería un análisis bastante más exhaustivo que
éste. Baste decir que la emotiva Primera Generación
sigue siendo la mejor de la franquicia, pero que esta resulta todavía
más espectacular y no cuesta colocarla al mismo nivel del primer
X-Men o de X-Men
2. El único inconveniente
'grave' que le encuentro es que muchas cosas interesantes suceden
fuera de cámara y me hubiera gustado verlas. Por ejemplo: ¿cómo
capturaron a Azazel
y a Ángel,
especialmente cuando el primero parece tan difícil de atrapar? ¿Qué
fue de Banshee
o de Emma Frost?
¿Por qué tardaron tantos años en ponerse en marcha los Centinelas
tras la muerte de Trask? ¿Cómo se restableció Lobezno de la
pérdida (no quiero dar detalles) de Lobezno Inmortal?
Es más: antes del viaje en el
tiempo, en la continuidad original, ¿cómo escapó Mística del
cautiverio que se nos cuenta? ¿Cómo escapó Erik del suyo? ¿Cómo
se volvieron a reunir? ¿Antes se volvió a unir a Xavier para
encontrar a Jean Grey,
como se narró en la secuencia inicial de La Decisión
Final? ¿Cómo recuperó la fe
Xavier? Preguntas sin respuesta que quedan a la imaginación del
espectador.